Nuestro proyecto surge ante la necesidad de identificar, visibilizar y denunciar la situación de violencia vivida por la mujer en nuestra sociedad, y en especial aquellas mujeres que se encuentran en contextos de prostitución, víctimas de abusos, trata y explotación sexual.

Ofrecemos una atención integral a las víctimas detectadas de cara a su recuperación y reinserción, garantizando la defensa de los derechos de estas mujeres, trabajando paralelamente en la prevención y sensibilización de la sociedad.

La pandemia sanitaria tiene y tendrá graves consecuencias para las personas más vulnerables, como las mujeres que atendemos en nuestros programas. Por ello, la alta demanda indudablemente continuará en el tiempo, con la necesidad de acompañar desde nuestros servicios especializados. Además, es clave anticiparnos a posibles situaciones de nuevo confinamiento y la repetición de situaciones como las de estos meses, como por ejemplo mujeres confinadas en clubs y dificultad de coordinación ante el desbordamiento de todos los sistemas.

Somos  conscientes de que son muchas las formas en que se puede contribuir para erradicar la violencia contra las mujeres,  si bien apostamos por articular un proyecto de atención a mujeres, que se inicia con la siempre compleja toma de contacto con la mujer y su identificación como víctima,  trabajamos para que  estas mujeres puedan reconocerse a sí mismas,  ya que muchas llegan a normalizar la violencia vivida, y desde este reconocimiento emprender un camino de recuperación  y empoderamiento, mejorando y ampliando sus recursos.

La intervención abarca diferentes aspectos.

Contacto y acercamiento: se realizan visitas periódicas a los distintos contextos con mujeres en situación de prostitución (clubes de alterne, pisos de contacto, zonas de prostitución callejera). El trabajo en estos lugares es imprescindible, ya que las condiciones de reclusión, desinformación, de situación irregular y de temor hacen muy complicado que sean ellas las que se acerquen a los recursos por iniciativa propia. En las visitas además de la presentación de los servicios, se realiza reparto de material preventivo y de salud, resolución de consultas in situ y micro-talleres de temáticas diversas como: recursos y prestaciones, infecciones de transmisión sexual, ocupación del ocio y tiempo libre etc.

Información y Orientación: Se ofrece información y asesoramiento sobre los distintos recursos sociales existentes a disposición de las mujeres. Así mismo se facilita asesoramiento jurídico especializado, facilitando la asistencia necesaria para la tutela de sus derechos (documentación, posible protección como testigo, regularización de la situación en el país de las mujeres extranjeras, gestión de autorizaciones de residencia, obtención de orden de protección u otras medidas cautelares etc.). Facilitando el apoyo y respaldo necesario en el proceso de denuncia, y orientación en el posterior proceso judicial.

Desarrollo personal y Social: Nuestro servicio ofrece un espacio centrado en crear un clima de confianza desde el que se les brinda el apoyo emocional y biopsicosocial necesario para enfrentar la violencia, el abuso y la explotación, espacio imprescindible para la recuperación y reinserción.  En el trabajo que realizamos, nos esforzamos en que la mujer se constituya como principal agente de su proceso, la mujer es el centro, se trata de ir avanzando a su lado a través de distintas entrevistas de intervención, planificar con ella, que ella vaya siendo la que marque hasta dónde puede llegar, qué es lo que quiere lograr y las fuerzas que tiene para lograrlo. 

Apoyo Económico: En el trabajo realizado en el proyecto a lo largo de estos años, constatamos la necesidad de mantener una línea de apoyo económico para sufragar las necesidades básicas a las mujeres con las que trabajamos. Es necesario poder ofrecer un apoyo económico tanto aquellas mujeres en situaciones marginales o en situación de explotación o violencia, pues es imprescindible garantizar unos ingresos mínimos de forma transitoria hasta que la inserción laboral normalizada sea efectiva para poder sustituir los ingresos procedentes de la prostitución, explotación o en ocasiones de su propio agresor. Se trata de apoyar un proyecto de vida personal propio digno al margen de la violencia o explotación o la mercantilización de sus cuerpos.

Prevenir los delitos relacionados con todas las formas de violencia contra las mujeres y garantizar su protección, recuperación y el acceso a sus derechos.

Prevenir y detectar situaciones de violencia en la vida de las mujeres, en especial en los contextos en los que se ejercer la prostitución.

Promover y acompañar el desarrollo y cuidado personal de las mujeres y de sus hijos/a de cara su plena integración social.

Facilitar asesoramiento y apoyo especializado en el ámbito social, jurídico y psicológico.

Fomentar la coordinación y cooperación entre los servicios e instituciones que trabajen con mujeres, buscando dar el mejor servicio posible.

Fomentar la sensibilización y concienciación social sobre la violencia contra las mujeres y en especial contra la trata de mujeres con fines de explotación sexual.

Nuestros proyectos necesitan tu apoyo, cada gesto cuenta