Caritas Internationalis condena los nuevos ataques en Gaza
El comunicado de la confederación internacional alerta sobre el empeoramiento de la catástrofe humanitaria que ya sufre la población.
Caritas Internationalis ha hecho público un comunicado en el que condena “la reanudación de los ataques aéreos en Gaza, que han causado la muerte de cientos de personas. Esto marca la mayor escalada de violencia desde el alto el fuego de enero y ha sumido una vez más a la población civil en el miedo, el sufrimiento y el desplazamiento».
Violación del derecho internacional
“El bombardeo constituye una grave violación del Derecho Internacional Humanitario. Exigimos urgentemente el restablecimiento inmediato del alto el fuego para evitar más pérdidas de vidas y proteger la dignidad y la seguridad de todos los civiles -continúa la confederación internacional de Cáritas-. La protección de las vidas inocentes debe ser la máxima prioridad”.
Riesgo de hambruna
La situación se agrava aún más por el bloqueo de la ayuda humanitaria desde el 2 de marzo, lo que aumenta el riesgo de hambruna en Gaza.
“Las condiciones en Gaza ya eran una catástrofe humanitaria extrema, con la gente sin comida, agua, refugio, alcantarillado ni servicios básicos fiables. El bloqueo de la ayuda y los nuevos ataques agravarán la situación drásticamente. Cáritas aboga por un alto el fuego inmediato y el acceso humanitario sin restricciones, e insta a todas las partes en el conflicto y a toda la comunidad internacional a que hagan de esto una prioridad inmediata. Cada minuto que pasa sin actuar se cobra más vidas inocentes”, lamenta Alistair Dutton, secretario general de Caritas Internationalis.
Caritas Internationalis se solidariza con todos los afectados por esta violencia e “insta a todas las partes, en particular al Estado de Israel, a cesar las hostilidades de inmediato”. “Los civiles nunca deben ser blanco de ataques. La protección de las vidas humanas y el restablecimiento del acceso humanitario deben ser las máximas prioridades”, concluye el comunicado.
Foto: Cáritas Jerusalén