Memoria anual 2022 de la Cáritas Parroquial Castrense de Tenerife

Palabras de nuestro Capellán Presidente

En este segundo año desde que partimos hacia este ilusionante proyecto
de nuestra Cáritas Parroquial Castrense de Tenerife, nos hemos centrado
principalmente en la Persona, elemento primordial de nuestra obra de
misericordia, impulsando las obras sociales en favor de los más vulnerables.

Mediante campañas de aportación cristiana de bienes se ha
contribuido a socorrer las necesidades de familias vulnerables.

Esto ha sido posible, sin duda alguna, gracias a la generosidad de mucha
gente. Más que nunca, en CÁRITAS asistimos a la dramática realidad donde, por situaciones personales, se precisa la ayuda para paliar en lo posible el sufrimiento de algunas familias.

Nuestro Santo Padre, en su catequesis sobre la caridad y la alegría, nos indica que la Caridad es sobre todo una gracia, un regalo; poder amar es un don de Dios, y debemos pedirlo. Y Él lo da gustoso, si nosotros se lo pedimos.

La Caridad en si misma, representa amor benevolente y gratuito hacia el prójimo, implica además, solidaridad con la situación que viven los demás y disponibilidad para servirles en lo que necesitan. La caridad no es sólo un sentimiento afectivo, sino una actitud interior que se proyecta hacia el otro realizando acciones positivas en su favor.

Esto es lo que refleja nuestra Memoria 2022. Obras, muchas obras solidarias en favor de los más necesitados que son la expresión del amor de miles de donantes y de nuestros voluntarios.

Sin olvidar que detrás de estos números debemos apreciar lo verdaderamente
importante, las personas, los beneficiarios de la acción social de CÁRITAS CASTRENSE con su historia de dolor y sufrimiento.

Se presenta esta Memoria para dar cuenta de lo que hacen con lo que ponemos en sus manos; para dar gracias a los que lo han hecho posible y para animar a todos a seguir colaborando con mayor generosidad.

Rvdo. Padre Ramón Luis García Guardado.
Capellán Presidente CPC Tenerife.