Noticia21/07/2023

Hermanas Mercedarias de la Caridad: 25 años al servicios de las personas sin hogar en Aranjuez

El pasado 20 de julio del 2023 se cumplieron veinticinco años de la llegada de las Hermanas Mercedarias de la Caridad al centro para personas sin hogar San Vicente de Paúl de Aranjuez. Para conmemorar este cuarto de siglo de la orden religiosa al frente de la dirección del albergue, de titularidad de Cáritas Diocesana de Getafe, se celebró una misa de acción de gracias en la capilla del centro.

La Eucaristía fue presidida por el obispo auxiliar de la Diócesis de Getafe don José María Avendaño, por el delegado diocesano de Cáritas don Jesús de Santos y por algunos de los párrocos de las diferentes parroquias de la Villa de Aranjuez. Además, a la celebración acudieron el director de Cáritas Diocesana de Getafe, Jesús Casares, los subdirectores de la organización eclesial de acción social, Isabel García, y de comunicación, César García; la Superiora General de las Mercedarias de la Caridad, Sor Julia Tajuelo, trabajadores, voluntarios y personas acogidas en el centro.

Que esta casa sea luz del Evangelio en la Diócesis

Don José María Avendaño quiso agradecer desde el principio, la entrega y dedicación de las Mercedarias de la Caridad en el centro para personas sin hogar de Aranjuez. Además de, señalar que este recurso es el único que hay para esta misión en el sur de la Comunidad de Madrid. 

Avendaño destacó la figura de don José Ramos, sacerdote en la parroquia San Pascual de Aranjuez, que en 1980 junto con un grupo de personas voluntarias y con el apoyo del Ayuntamiento, puso en marcha el Albergue “San Vicente de Paúl”.

En los primeros años el objetivo principal del ‘albergue’ era cubrir las necesidades básicas de las personas sin hogar durante un tiempo limitado. Posteriormente, la atención fue evolucionando y se empezaron a diseñar itinerarios de atención individualizados y prolongados en el tiempo, que proporcionaran a las personas atendidas, una oportunidad de superar la situación de sin hogarismo.

Tras unos años en los que la atención cambió de ubicación, el centro se ubicó en la dirección actual, donde llegaron las hermanas Mercedarias de la Caridad en el año 1995 para asumir la dirección del centro junto a Cáritas Diocesana de Getafe y dedicar su vida a las personas sin hogar, ya que la la comunidad de religiosas convive y trabaja en el centro junto con los residentes los trescientos sesenta y cinco días del año.

«Las hermanas entregan su vida cada día por las personas que se encuentran sin hogar», como resaltó el obispo auxiliar, que recordó una de las tantas duras situaciones que ha vivido en el albergue, a través de la figura de una de las religiosas que estaban en ese momento en el centro, «un día una persona que estaba acogida, llego ebria e insultando al personal del centro. Sor Ascensión salió con las únicas armas de su palabra. Qué ternura, qué escucha, qué acogida, con las que hizo que esa persona se arrepintiera y se pusiera de rodillas para pedir perdón por su actitud».

Avendaño resaltó «el importantísimo papel que las hermanas tuvieron durante el confinamiento» por la pandemia de la COVID-19, un momento muy duro, durante el cual, el centro se convirtió en un refugio para las personas acogidas y las religiosas en su única familia para afrontar esa dura situación.

Además, quiso agradecer a la superiora general de las Mercedarias de la Caridad, su presencia y por apostar por este centro. Orden a la que señaló como su referente espiritual y de entrega por los que se encuentran en esta situación de vulnerabilidad.

Finalmente, don José María Avendaño, hizo un llamamiento a mirar a nuestro alrededor, para no ser ajenos al dolor de las personas sin hogar, y tener un corazón caritativo, como hizo el obispo de la Diócesis de Getafe, don Ginés García, que hace tres años, durante una visita pastoral, vio a un hombre que dormía en un banco y le invitó a ir al centro de Aranjuez, donde reside desde entonces. 

25_aniversario_mercedarias_caridad_diocesis_getafe

Testigas del cambio de vida de las personas sin hogar

Por su parte, la Superiora General de las Mercedarias de la Caridad, Sor Julia Tajuelo, quiso agradecer a la iglesia getafense, su confianza en la orden para coordinar el centro de Aranjuez, y, sobre todo, por haberlas permitido, en estos 25 años, desarrollar su carisma de «amor y servicio redentor, con aquellos hermanos nuestros que por distintas circunstancias se han visto apaleados, heridos, sin hogar por algunas personas y ambientes». 

Como decía su fundador, el beato padre Zegrí, «nuestra misión no termina mientras que haya una herida que curar o un corazón que consolar», por ello, para ellas es un regalo de Dios, poder seguir prestando servicio en ese albergue para transeúntes durante más de dos décadas.

Sor Julia quiso agradecer la gran labor realizada en estos veinticinco años, por parte de la comunidad religiosa, ahora encabezada por sor Isabel, por los voluntarios, trabajadores y el pueblo de Aranjuez, en un centro que pretende acompañar y cubrir las necesidades básicas de las personas en esta situación de vulnerabilidad.

Además, quiso destacar cómo ese centro ha sido testigo de muchas historias de esperanza y superación, de haber visto a personas cambiar su vida, por ello decía que «estamos muy felices y agradecidas de haber sido parte de esas historias».

Por último, quiso reiterar el compromiso de la orden, junto a Cáritas, de seguir trabajando por las personas en situación de sin hogar de la Diócesis de Getafe, siguiendo el lema de las Mercedarias de la Caridad «Todo para bien de la humanidad, en Dios, por Dios y para Dios».

caritas_madrid_sur_25_aniversario_mercedarias_albergue_sin_hogar

 

Gracias por llevar a cabo las Obras de Misericordia 

Por último, Jesús Casares, director de Cáritas Diocesana de Getafe, intervino para agradecer el gran trabajo realizado por las hermanas Mercedarias de la Caridad en el centro. Además de, resaltar y hacer extensivo el agradecimiento, a los voluntarios, al Ayuntamiento de Aranjuez y al pueblo de la villa del sur de Madrid.

También, Casares quiso tener unas palabras de recuerdo para el sacerdote José Ramos (Pepe Ramos como era conocido), que impulsó ese centro, del desde que se «hace una labor muy importante» en el desarrollo de las personas sin hogar.

Quiso invitar a las hermanas a seguir su gran labor, siguiendo su carisma «la practica de la caridad redentora, ejerciendo todas las obras de misericordia espirituales y corporales en la persona de los pobres, sirviéndoles en cuantas obras puedan redundar en favor de la humanidad pobre y necesitada».

Finalmente, Jesús Casares y la subdirectora de «Acción Social» de Cáritas Diocesana de Getafe, hicieron entrega a la superiora de la orden y a la hermana superiora del centro, Sor Isabel, de una placa conmemorativa del aniversario, en agradecimiento por la gran labor realizada en estos veinticinco años al lado de las personas en situación de sin hogar en la Diócesis de Getafe.

 

 

DESCARGAR FOTO

DONAR