Noticia06/06/2024

6.085 personas recibieron el apoyo de Cáritas en Cantabria durante el año 2023

Durante el año pasado, Cáritas atendió en Cantabria a 6.085 personas, lo que supone un incremento del 10% en relación con el año anterior.

Así se recoge en la memoria anual 2023. Un documento que señala cómo cada vez llegan más personas nuevas en busca de ayuda (una de cada tres). La mayoría son mujeres y casi la mitad, familias con niñas y niños a su cargo.

Fueron los 57 equipos de voluntariado de las Cáritas Parroquiales distribuidas por toda la región quienes acogieron a la mayor parte de las personas acompañadas el pasado año. Es ahí donde se integra la mayoría de las 363 personas voluntarias que colaboran con la entidad y que, junto con los 634 socios y 1.602 donantes, hicieron posible en 2023 que Cáritas pudiese seguir apoyando a la población más vulnerable.

INVERSIÓN

La inversión realizada por Cáritas Diocesana de Santander a lo largo de 2023 fue de 3.449.031 euros.

En cuanto al reparto de las ayudas, que experimentaron un aumento del 15%,  416.000 euros se destinaron a cubrir necesidades básicas en alimentación e higiene de casi 4.500 personas. Una atención que se prestó por medio de tarjetas monedero y otros formatos económicos que dejan atrás la entrega de alimentos en especie.

1.296 personas tuvieron acceso a calzado y vestido a través de las dos tiendas de segunda mano Moda-Re que existen en Cantabria; 670 pudieron mantener su vivienda con una inversión superior a los 160.500 euros y se cubrieron los gastos en medicación, tratamientos dentales o gafas de 319 personas.

PROYECTOS ESPECÍFICOS

Además, Cáritas Diocesana de Santander tiene en marcha proyectos específicos para diferentes colectivos en situación de vulnerabilidad. A lo largo del pasado año desde la entidad se prestó acompañamiento a 144 mujeres en contexto de prostitución y/o exclusión social, a 142 niñas y niños, a 41 personas sin hogar y a 11 personas con enfermedades crónicas y sin red social de apoyo, que recibieron acogida en el centro Hogar Belén, gestionado en colaboración con las Hermanas de la Caridad de Santa Ana.

Pero las inversiones no se realizaron únicamente en el entorno más cercano. Desde Cantabria, la entidad contribuyó con 119.000 euros a apoyar distintas emergencias en otras partes del mundo, como las crisis humanitarias de Tierra Santa, Ucrania o Siria.

También se respaldó económicamente el trabajo de misioneros  y misioneras de esta diócesis a través de los 10 proyectos seleccionados en el Gesto de Cuaresma, que recaudó el año pasado una cifra cercana a los 82.000 euros.